
07 Feb ¿Cómo puedo quitar la humedad ambiente de la habitación?
Quitar la humedad ambiente habitación puede darnos más de un quebradero de cabeza en ciertas estaciones y climas. Y aunque es algo habitual, especialmente en invierno, puede generar problemas relacionados con la salud como alergias, interferir en la respiración o incluso en el descanso. Por si fuera poco, la humedad puede favorecer la aparición de moho e incluso la proliferación de ácaros, algo que no solo afecta a la salud, sino también a la durabilidad del mobiliario y textiles del hogar. Por suerte, existen diferentes soluciones que nos permiten mantener la calidad del aire en casa. Por eso, a continuación, vamos a ver cómo quitar la humedad ambiente de la habitación a través de diferentes consejos prácticos.
Quitar la humedad ambiente de la habitación: ¿por qué es importante controlarla?
Los niveles adecuados de humedad relativa se sitúan entre el 40 y el 60 %. Cuando se superan estos porcentajes no solo puede llegar a afectar a la calidad del aire, sino también a los muebles y paredes de la habitación. Además, el ambiente tiende a sentirse más pesado y puede llegar a generar mal olor; propiciar la aparición de moho en paredes y techos y/ o manchas en muebles y tapicerías.
Todo ello también contribuye a que aumenten las probabilidades de sufrir alergias y otros problemas respiratorios que pueden tener un impacto en la calidad de vida y del descanso. Y no solo eso: una humedad alta puede aumentar o disminuir la sensación térmica de la vivienda. En verano puede producir una mayor sensación, mientras que en invierno puede producir más frío y dificultad para mantener la temperatura.
Principales causas de la humedad ambiental en el interior de una habitación
Antes de ponerse manos a la obra para quitar la humedad ambiente de la habitación, conviene detectar qué la está causando, aunque a veces esto no sea una tarea fácil. Existen muchos motivos que van desde la calidad de los aislamientos hasta la ventilación y nuestros hábitos en casa, debemos saber que contar con humedad en la habitación puede provocar ronquidos en los niños. Los más comunes son los siguientes:
- Tender la ropa dentro de casa: se trata de un hábito que aumenta la concentración de humedad y que puede hacer que la ropa genere mal olor al no secarse de manera apropiada.
- Falta de una ventilación adecuada: si la habitación permanece mucho tiempo cerrada, el aire húmedo se acumula. Es especialmente significativo tras la noche.
- Ausencia de ventilación en el baño: es el lugar donde, por su naturaleza, tiende a concentrarse la humedad. Además, los altos niveles de vapor pueden extenderse al resto de la casa.
- Filtraciones: las paredes, los techos o los cierres deficientes en puertas y ventanas son los lugares habituales por donde puede acceder la humedad a nuestras casas.
Según qué produzca la humedad, las soluciones pueden variar desde cambios de hábitos hasta reparaciones estructurales.
¿Cómo quitar la humedad ambiente de la habitación? 6 soluciones prácticas que puedes implementar
Para deshacerte de la humedad en una habitación o en casa puedes implementar una serie de pasos para, por un lado, evitar su acumulación excesiva y, por otro, eliminarla. Dependiendo del nivel de humedad en la habitación es posible que debas poner en práctica más de una de estas soluciones.
- Ventila de manera adecuada: abre las ventanas diariamente de 10 a 20 minutos para que el aire fresco circule y se renueve el del interior. Si una habitación no tiene ventilación natural, considera instalar rejillas, ventiladores o un sistema de ventilación mecánico que renueve el aire.
- Utiliza bolsas de gel sílice o carbón activado: estos componentes pueden colocarse en bolsitas y distribuirlas en diferentes puntos estratégicos. Son muy útiles en armarios y debajo de la cama. Las propiedades de estos materiales les permiten absorber la humedad, pero necesitan renovarse para garantizar su capacidad deshumidificadora. Se trata de una solución eficaz y económica con la que puedes controlar los niveles de humedad si estos no son muy altos.
- Tiende al aire libre: incluso si es invierno y llueve, y siempre que sea posible, conviene esperar a los días propicios para hacer la colada, ya que secarla en el interior incrementa la humedad considerablemente.
- Ayúdate de plantas: aunque un exceso de plantas puede tener el efecto contrario, lo cierto es que algunas pueden absorber la humedad de una habitación. Algunas de ellas son el lirio de la paz, las tillandsias o plantas de aire, las cintas o el helecho de Boston.
- Utiliza un deshumidificador: este aparato está diseñado específicamente para eliminar el exceso de agua presente en el ambiente. Existen modelos de diferentes tamaños y capacidades, cosa que facilita la tarea de encontrar el más adecuado dependiendo del tamaño de la habitación.
- Ventila el colchón y edredones y elige materiales transpirables: estas piezas de mobiliario, por su función, están expuestos a la humedad. Si la habitación es propicia a concentrarla, busca aquellos que estén fabricados con materiales transpirables que favorezcan la circulación del aire. Esto no solo te ayudará a controlar la humedad ambiental, sino que también prolongará la vida de tu colchón y edredones.
Por último, vigila los muebles que permanecen cerca de la pared en las habitaciones con mayores niveles de humedad. Límpialos cada vez que sea necesario para evitar la proliferación de manchas y moho. Además, si las ventanas de la estancia tienden a acumular condensación, sécalas con un paño para impedir que llegue a las paredes.
Con estos consejos puedes mantener a raya la humedad en una habitación o en tu casa, pero recuerda que es importante detectar su origen para que las soluciones resulten efectivas.
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