14 Ago La siesta, un sueño verdaderamente reparador

En España, la cultura de la siesta está muy arraigada, se hace después de comer y sirve a nuestro organismo para reponer fuerzas y estar con energías renovadas para afrontar la tarde.

La siesta no es síntoma de vaguería, es una necesidad fisiológica que cuenta con beneficios muy importantes para el cuerpo humano. Una mini siesta de 20-30 minutos nos puede ayudar a equilibrar los niveles hormonales y las defensas. Además ayuda a prevenir problemas de corazón, ya que este se relaja y vuelve a ritmos normales después de un día de estrés. La siesta tiene un efecto revitalizante a nivel neuronal, ya que mejora la retentiva, la memoria y la capacidad de concentración.

Es importante que la siesta tenga una duración entre 20 y 30 minutos como máximo para garantizar que no afecte a conciliar el sueño por la noche. Las siestas de larga duración cuentan con los mismos beneficios que las mini siestas pero pueden cambiar el ciclo circadiano de nuestro cuerpo, generando desequilibrios en el sueño.

Si tomamos siestas excesivamente largas podemos terminar sufriendo de insomnio.

La siesta, aun siendo conocida como el deporte nacional de España, no es tan común como pensamos, ya que solo el 16% de los españoles duermen siesta a diario. Cada vez más países se unen a la cultura de la siesta, en Alemania el 22% de la población duerme la siesta 3 veces a la semana.

Este verano aprovecha para recuperarte y descansar cuerpo y mente con una buena noche de descanso y una siesta después de comer…eso sí de no más de 20-30 minutos.

Fuente: Primer estudio sobre salud y descanso. Fundación de Educación para la Salud del Hospital Clínico San Carlos (FUNDADEPS) y Asociación Española de la Cama (Asocama), 2009.