
21 Feb ¿Cuáles son las medidas ideales para una cama infantil?
Elegir la cama adecuada para un niño es importante, ya que la decisión influirá directamente en la calidad de su descanso y su crecimiento. Una de las claves son las medidas cama infantil; deben adaptarse al presente, pero también al desarrollo físico y a las dimensiones disponibles en la habitación. Por lo tanto, son diferentes los factores que se deben de tener en cuenta y, para tomar la mejor decisión, conviene conocer cuáles son las opciones disponibles de medidas colchón para cama infantil y qué aspectos considerar para garantizar la comodidad, seguridad y funcionalidad.
Guía de medidas cama para niños: tamaños según su desarrollo
Las medidas cama infantil existen en diferentes tamaños estándar. Habitualmente están pensados para adaptarse a las distintas etapas de crecimiento. Por norma general, se aconseja que el colchón sea 20 centímetros más grande que el niño que la usará. Por otro lado, cuánto más grande sea la cama, más tiempo podrá usarla y aprovecharla antes de que se le quede pequeña. Para que puedas tener una idea completa, las medidas más comunes son las siguientes:
- Colchones para cunas: entre los tamaños que pueden encontrarse, están los más pequeños, como el de 60 x 120 centímetros, que puede encajar en cualquier espacio y puede ser ideal de los 0 a los 2 años. Sin embargo, existen de dimensiones un poco más grandes, como de 70 x 140 centímetros, cuyo uso puede extenderse hasta los 3 años, aproximadamente.
- Cama infantil pequeña: aquí ya pasamos a colchones adecuados para niños pequeños que han dejado la cuna y se enfrentan a su primera cama. Se pueden encontrar de 70 x 140 centímetros o de 80 x 160 centímetros, ideales para niños con más altura o que se mueven mucho mientras duermen.
- Cama individual: el siguiente tamaño es el de una cama individual. Suele ser una opción a partir de los 5 años y su medida estándar es de 90 x 190 centímetros, aunque se pueden encontrar también de 2 metros de largo. Este colchón puede acompañar al niño hasta etapas más avanzadas, como la adolescencia o la juventud.
Medidas cama infantil: ¿qué tener en cuenta a la hora de elegir?
Como hemos visto, existen diversas opciones que pueden amoldarse a todas las edades y espacios. Sin embargo, conviene tener en cuenta una serie de factores para dar con el tamaño ideal. En primer lugar, uno de los aspectos más importantes es la etapa de crecimiento en la que se encuentra. El desarrollo ocurre a ritmos diferentes dependiendo del niño. Por ejemplo, si estamos ante uno que ya sale y entra en la cuna por sí mismo o sus pies tocan los extremos de esta, conviene dar el paso de cambiarlo a una cama. Esto suele ocurrir a partir de los 3 años.
En muchas ocasiones se pasa de la cuna a una cama individual con protecciones, cosa que tiene sus ventajas e inconvenientes. Por un lado, le durará más tiempo y no tendrá que pasar por colchones intermedios, algo que sin duda es una ventaja económica. Pero, por contra, la cama puede ser demasiado grande y no cobijar al niño lo suficiente, lo que puede repercutir en su descanso. Aquí entran las particularidades del pequeño, sus preferencias y necesidades.
Otro aspecto que considerar es el espacio disponible en la habitación. Si se trata de un dormitorio pequeño, puede ser una opción seleccionar tamaños intermedios para que quede espacio para juegos.
Por último, y ante la duda, en la actualidad existen camas evolutivas que se adaptan a cada etapa de crecimiento del niño, lo que permite usar la estructura de la cama por un largo período de tiempo y tan solo cambiar el colchón.
La seguridad y la funcionalidad son factores clave para dar con la cama infantil ideal
Como hemos visto, las medidas de un colchón individual se pueden agrupar en tres según la edad y el tamaño del niño. La elección de una u otra deberá responder a las necesidades del pequeño, bien por una cuestión de tamaño o bien por la necesidad de sentirse más recogido durante el sueño. Y por supuesto, las dimensiones disponibles en el espacio. Sin embargo, hay otras cuestiones que se deben tener presente a la hora de decantarse por la definitiva.
La funcionalidad y las opciones de almacenamiento es una de ellas. Esto es especialmente útil si se dispone de poco espacio. Las camas con cajones o arcones debajo son una solución que aúna la comodidad y la practicidad. En una línea similar, las camas nido sustituyen el almacenaje por una cama extra, ideal si el pequeño duerme a menudo con amistades.
Asimismo, la seguridad es un elemento crucial. Para evitar caídas, especialmente si la cama tiene cierta altura, conviene recurrir a protecciones como barandillas laterales, algo que cobra especial importancia si el niño es pequeño.
Dar con la medidas para una cama infantil ideal es una tarea importante para asegurar que los más pequeños de la casa obtengan un sueño de calidad y reparador. Al elegir entre las distintas medidas de cama infantil, es fundamental considerar la edad de la criatura, sus necesidades y el espacio disponible. De esta forma, tomarás la decisión acertada para garantizar que la cama sea funcional y duradera.
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