04 Jun ¿Es bueno dormir con la luz encendida o de día? Por el Dr. Albares
El ambiente en el que dormimos es básico para propiciar un buen descanso y favorecer una correcta calidad del sueño. Existen múltiples estudios en los que se constata que dormir con luz no permite un correcto descanso y, a largo plazo, puede tener consecuencias sobre nuestra salud.
Cómo afecta la luz al descanso
La exposición a la luz antes de meternos en la cama transmite una información incorrecta al cerebro. Este entiende que todavía no es hora de ir a dormir y retrasa dicho momento. Si, además, mantenemos la luz encendida durante toda la noche, las repercusiones son mayores. A lo largo de la noche alternamos periodos de sueño NoREM y periodos de sueño REM.
- La luz encendida toda la noche provoca que disminuyan las fases de sueño profundo. Se caracterizan por ser las más reparadoras, tanto física como mentalmente.
- Además, se incrementan el número de microdespertares.
Qué hacer para evitar la luz al dormir
La Sociedad Española de Sueño (SES) recomienda las siguientes medidas en relación con la luz por la noche:
- Evitar los dispositivos electrónicos al menos dos horas antes de ir a dormir. La luz azul que emiten es la más estimulante para el cerebro, y es capaz de suprimir la secreción de melatonina.
- Antes de ir a dormir, permanecer en un ambiente con luz cálida.
- Dormir en oscuridad completa, no dejando luz artificial o la televisión encendidos.
- Bajar las persianas o utilizar un antifaz (si no tenemos persianas en casa).
¿Qué consecuencias tiene sobre la salud dormir con la luz encendida?
Los trastornos más habituales que aparecen por la exposición a la luz a horas indebidas son los trastornos del ritmo circadiano y el insomnio.
Cuando la exposición a la luz se prolonga en el tiempo, el sistema inmunológico se ve mermado, con una bajada de defensas. Esto nos predispone a sufrir más enfermedades infecciosas. Además, el cuerpo sufre una mayor dificultad para segregar insulina, lo que provoca niveles más elevados de azúcar en sangre, con el consecuente riesgo de desarrollar diabetes.
Todos estos consejos deben aplicarse tanto en adultos como en niños. Debemos conseguir que los niños aprendan a dormir en oscuridad, pero, si en algún momento de la infancia necesitan dormir con la luz encendida, no pasa nada, es una etapa transitoria que debería resolverse en poco tiempo.
Dar la información correcta a nuestro cerebro en cada momento del día es fundamental. Eso es lo que ayuda a mantener nuestros ritmos circadianos equilibrados y tener un descanso de calidad.
Fundador y director de Medicina del Sueño Doctor Albares, Centro Médico Teknon.
Especialista europeo en Medicina del Sueño (titulado por European Sleep Reseach Society en el año 2014) y miembro de la Sociedad Española del Sueño (SES) y de la Sociedad Europea del Sueño.
Colegiado por el colegio de Médicos de Barcelona y especialista en Neurofisiología Clínica.
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